Es un procedimiento quirúrgico para mejorar los signos visibles del envejecimiento de la cara y el cuello.

Puede mejorar los signos más visibles del envejecimiento mediante el tensado de las estructuras más profundas, la readaptación de la piel de la cara y el cuello, y el aumento selectivo con grasa  de algunas áreas seleccionadas de la cara.

Dependiendo del área o áreas a tratar (frente, tercio medio facial o cuello) y dependiendo de la si se asocia a cirugía de párpados va de dos a cinco horas en promedio.

De siete a catorce días, con un promedio de diez. En los primeros tres días después de la cirugía se utilizan compresas frías en las regiones tratadas.

No asolearse durante al menos un mes los primeros días dormir semisentada y evitar agacharse o realizar esfuerzos durante algunos días.

Técnica quirúrgica utilizada para eliminar depósitos de grasa no estéticos de determinadas áreas del cuerpo, incluyendo cara y cuello, brazos, tronco, abdomen, nalgas, caderas y muslos, rodillas, pantorrillas y tobillos.

Se trata de una cirugía para eliminar depósitos localizados de tejido graso que no responden a la dieta o el ejercicio, y que llamamos “lipodistrofias” por considerarse acúmulos de grasa con localización o cantidades anormales.

Cuando se planean retirar volúmenes superiores a los tres o cuatro litros de grasa, es recomendable no asociar procedimientos  quirúrgicos de duraciones prolongadas.

La cantidad de grasa a extraer deberá ser profundamente discutida con el cirujano, y las posibles necesidades de transfusión sanguínea bien establecidas.

Es un procedimiento quirúrgico que elimina el exceso de piel y tejido graso del abdomen medio y bajo (Dermolipectomía), pero además afronta y tensa los músculos de la pared abdominal para dar un abdomen más plano abdomen (abdominoplastía). Las indicaciones más comunes son: la corrección de las secuelas del embarazo o pérdidas masivas de peso.

. No es un tratamiento quirúrgico para el sobrepeso.

Las personas obesas que tienen intención de perder peso deben posponer cualquier clase de cirugía del contorno corporal hasta que sean capaces de mantener su pérdida de peso, de lo contrario, los resultados obtenidos pueden perderse al incrementar nuevamente de peso, o símplemente no ser tan espectaculares como en pacientes delgadas.

Las relativas al contorno corporal incluida la liposucción, o puede realizarse al mismo tiempo que otras cirugías electivas, ocasionalmente asociada por ejemplo a cirugías ginecológicas.

Es de entre 10 y 14 días. Frecuentemente se colocan drenes al finalizar la cirugía (pequeños tubos que ayudan a drenar el líquido que se acumula por debajo de las heridas), los cuales se retiran habitualmente entre dos y siete días después.

No asolearse durante al menos un mes, no cargar objetos pesados, no agacharse. Se debe utilizar una faja especial durante algunas semanas para asegurar un resultado satisfactorio.

Es un procedimiento quirúrgico destinado a aumentar el tamaño y mejorar la forma del busto mediante la colocación de implantes (prótesis) mamarios. Recientemente ha tomado importancia el aumento con la inyección de grasa de la misma paciente con el denominado “sistema Brava”.

En relación con la composición están disponibles en el mercado implantes rellenos de solución salina (agua) e implantes rellenos de silicón cohesivo. Estos últimos son los que actualmente han demostrado la más alta seguridad, resistencia y durabilidad, así como los resultados más naturales.

Ambos pueden tener una superficie lisa o texturizada (rugosa) con algunos de una superficie intermedia llamados microtexturizados. El cirujano plástico seleccionará el más adecuado para cada paciente dependiendo de varios factores: el tamaño y forma deseado, la estatura y complexión física, la edad, etc.

La cirugía consiste en la implantación de prótesis, ya sea detrás del tejido mamario, tejido mamario (subglandular), debajo de la fascia muscular (subfascial) o debajo del músculo anterior del tórax (submuscular), el pectoral mayor. Dependiendo de la indicación del cirujano, puede combinar dos localizaciones: “dual plane”.

Para regresar a actividades cotidianas es de 7 y 10 días. Ejercicio intenso  y acostarse boca abajo tomará al menos 6 semanas

No asolearse durante al menos un mes, no elevar los brazos por encima de los hombros durante dos semanas (para evitar el desplazamiento de los implantes), no cargar objetos pesados. Limitar el uso de automóvil. Se debe utilizar un brassiere especial durante algunas semanas para asegurar el mejor resultado. La paciente puede realizar ejercicio ligero aproximadamente a las 2-4 semanas, y ejercicio intenso entre 6 y 8 semanas después de la cirugía.

Es una cirugía encaminada a reducir el tamaño del busto en pacientes habitualmente jóvenes con un crecimiento excesivo del busto durante su desarrollo. Puede favorecer también a mujeres que después de los embarazos o por cambios en el peso, tienen un tamaño excesivo de sus mamas.

Las pacientes con un excesivo tamaño de su busto se quejan de dolor en la espalda alta por cambios posturales, la impresión del resorte del brassiere en los hombros, ocasional irritación de la piel bajo el busto por humedad en el pliegue (intertrigo)  y que en ciertos casos favorece el desarrollo de infecciones por hongos. La cirugía se encamina a corregir todos estos problemas, además de la evidente afección psicológica asociada al excesivo tamaño.

Las pacientes jóvenes deben ser advertidas de posible producción insuficiente de leche durante la lactancia. Puede existir una reducción en la sensibilidad de los pezones y deben aceptar la cicatriz alrededor de la areola para su reducción y recolocación, así como la cicatriz conocida como  el “ancla “ .

La cirugía se lleva a cabo bajo anestesia general, y tiene una duración aproximada de 3 horas. Ya que normalmente se dejan colocados drenajes, es recomendable la hospitalización de una noche, aunque puede hacerse en forma ambulatoria.

Pueden iniciarse actividades a los 7 días, aunque debe evitarse el ejercicio y actividades intensas hasta cumplir al menos 4 a 6 semanas. Durante todo ese periodo se recomienda el empleo de una prenda compresiva postoperatoria.

Desde un inicio debe evitarse elevar los codos más allá de los hombros,  ejercicios intensos, apoyo directo en el busto y por supuesto dormir boca abajo.

Se refiere a la relocalización del complejo de la areola y el pezón en una posición anatómica normal. Usualmente se realiza en pacientes que han tenido embarazos, o que han sufrido frecuentes modificaciones en su peso, y como consecuencia el busto ha caído y ha perdido su volúmen. En la consulta debe determinarse si además la paciente necesita un aumento asociado del tamaño con prótesis, (mastopexia con implantes) o solo la “reconstrucción” de la mama como lo refieren algunas de las pacientes.

Dependiendo del grado de “descenso” o ptosis de la glándula mamaria la técnica a definir puede irse modificando, desde una cicatriz alrededor del pezón únicamente para descensos leves hasta de 2 o 3 centímetros, agregando una vertical para descensos de 4 a 6 centímetros o el “ancla” para ptosis mayores. En todos los casos puede asociarse la colocación de prótesis mamarias.

Dependerá de la técnica que se realice, en general son cirugías que toman entre 2 y 3 horas. Es habitual realizarla bajo anestesia general y se recomienda también la colocación de drenajes, por lo que es aconsejable dejar a la paciente hospitalizada una noche.

Al igual que la reducción mamaria, son preocupaciones relativas la longitud de las cicatrices y la posible afectación en la sensibilidad del pezón.

La recuperación posterior a la cirugía es semejante a la de otros procedimientos mamarios. 

Es recomendable no realizar ejercicio intenso antes de las 4 a 6 semanas. La paciente puede regresar a actividades cotidianas en 1 semana aproximadamente. Aplican también las restricciones en la elevación de los brazos, acostarse de lado o boca abajo y cargar objetos pesados. No se permite dormir boca abajo por lapsos superiores a las 4 semanas.

Son depósitos de tejido graso que se encuentran dentro de las mejillas, por debajo del nivel de los pómulos, entre los músculos de la masticación

Resulta en una mejor definición del contorno facial. Se emplea en personas con cara redonda, y el efecto logrado es similar al que se busca con maquillaje  cuando se aplican “sombra” bajo los pómulos, haciendo que esa región se vea más deprimida y adelgazada.

Las personas que se muerden con frecuencia la mejilla por dentro al momento de masticar.

La resección  de las bolsas de Bichat se realiza mediante dos pequeñas incisiones realizadas en las mejillas por dentro de la boca, por lo que no quedan cicatrices visibles. El procedimiento se lleva a cabo bajo anestesia local únicamente. Cuando se asocia a otros procedimientos siempre será el último en realizarse por la alta cuenta bacteriana al interior de la boca.

Es ambulatoria y con molestias postoperatorias similares a las que se presentan tras la extracción de las muelas por el dentista.

La blefaroplastia es un procedimiento quirúrgico cuyo fin es eliminar el exceso de piel, grasa y músculo de los párpados, tanto superiores como inferiores

La blefaroplastia puede mejorar la piel flácida y las bolsas, y puede ayudar a mejorar la visión en personas mayores que presentan un exceso importante de párpado superior que cae sobre la pupila.

Aunque la  blefaroplastia reduce las arrugas predominantemente del párpado inferior,  no elimina las “patas de gallo” u otras arrugas, ni las “ojeras” oscuras, así como tampoco levanta unas cejas caídas (para lo cual se requiere una pexia de cejas). La blefaroplastia es diseñada individualmente para cada paciente, dependiendo de sus necesidades particulares.

El manejo de la grasa en años recientes favorece más su reacomodo para camouflajear el borde del hueso que con frecuencia aparece cuando envejecemos en lugar de su resección.

La coloración de las “ojeras” puede corregirse mediante la inyección de Células Madre Mesenquimatosas obtenidas de una pequeña liposucción. 

La otoplastia es un procedimiento de cirugía plástica que permite modificar los pabellones auriculares (orejas) cuando por deformaciones desde el nacimiento carecen de la angulación normal de sus pliegues internos, apreciándose con una proyección exagerada en el ángulo que tienen en relación a  los huesos de la cabeza.

La cirugìa esencialmente corrige ese despegamiento, favoreciendo un plegamiento más anatómico de dichas estructuras, que da como resultado una reducción considerable de su proyección. Ocasionalmente, la porción más cercana al conducto auditivo, que se denomina “concha”, tiene una medida mayor a la normal, por lo que debe reducirse durante el procedimiento.

La duración de la otoplastia  es de alrededor de dos horas. Puede realizarse bajo anestesia local y sedación o bajo anestesia general, ambas de forma ambulatoria. Las incisiones se efectúan en el pliegue posterior de la oreja, por lo que quedan ocultas y al finalizar el proceso de cicatrización son prácticamente imperceptibles.

Durante el postoperatorio es necesario utilizar una prenda compresiva especial (Ballerina) por alrededor de dos o tres semanas para mantener las orejas en una posición adecuada durante el período de cicatrización. El paciente puede regresar a sus actividades cotidianas en tres a cinco días, periodo en el que habitualmente se deja un vendaje.

La lobuloplastia es un procedimiento quirúrgico de cirugía plástica destinado a reparar defectos en el lóbulo de la oreja, por ejemplo, un “desgarro” o alargamiento  importante y poco estético del orificio para el arete, o un aumento progresivo en la longitud del lóbulo y pérdida de su firmeza que se presentan con el envejecimiento.

La cirugía consiste para el primer caso en hacer incisiones a los lados del orificio  o desgarro del lóbulo para cerrarlo. Nosotros recomendamos no aplicar nuevos aretes de inmediato, sino dar un lapso de 3 semanas para una correcta cicatrización, decidiendo después de este periódo el sitio ideal para su nueva colocación. Es recomendable no realizar el nuevo orificio en el sitio de la cicatriz resultante de la reparación, ya que ésta no es un tejido adecuado para sostener los aretes y fácilmente puede volver a desgarrarse.

Cuando la paciente desea una lobuloplastia como resultado del envejecimiento, normalmente se retira un fragmento de piel, ya sea haciendo cortes como un “pedazo de pay”, o en forma de semiluna siguiendo el contorno del lóbulo auricular con el fin de reducir su tamaño. Habitualmente el orificio para los aretes debe ser reparado en el mismo procedimiento para evitar su localización excéntrica como resultado de la reducción del tamaño global del lóbulo. El nuevo orificio se recomienda también que sea evaluado tres semanas después del primer procedimiento.

Se realiza bajo anestesia local, en quirófano menor, de forma ambulatoria y su duración aproximada es de 30 a 90 minutos (en caso de efectuarse en ambos lados).

Habitualmente las molestias postoperatorias son mínimas y el paciente puede regresar a sus actividades cotidianas al día siguiente del procedimiento.

La cirugía de la nariz (rinoplastia) es una cirugía plastica utilizada para producir cambios en el aspecto, estructura y función de la nariz. La rinoplastia puede reducir o aumentar el tamaño de la nariz, cambiar la forma de la punta, regularizar el dorso, adelgazarla en toda su longitud, estrechar la anchura de las alas, o cambiar el ángulo entre la nariz y el labio superior.

Esta operación puede ayudar a corregir defectos de nacimiento o posterior a traumatismos, y algunos problemas respiratorios.

Con las técnicas actuales, la gran mayoría de los pacientes pueden ser operados mediante incisiones realizadas por dentro de la nariz (rinoplastia cerrada). En algunos casos, estas incisiones internas se complementan con una pequeña que atraviesa la porción central entre los orificios de la narìz (columnella)  para lograr una mayor exposición de las estructuras internas, convirtiéndose en una rinoplastia abierta.

Puede realizarse cirugía nasal en el tabique, que es la estructura de hueso y cartìlago que divide a la narìz en mitades izquierda y derecha  (septoplastia) para mejorar la respiración al mismo tiempo que la rinoplastia.

La cirugía se lleva a cabo en alrededor de dos a tres horas, bajo anestesia general y habitualmente de forma ambulatoria. Al finalizar el procedimiento se coloca por fuera un vendaje de cinta adhesiva (micropore) y una férula rígida (plástico termoformado). 

Dependiendo de la técnica utilizada puede requerirse o no la colocación de tapones dentro de la nariz. Estos permanecen colocados entre 24 horas y tres días después de la cirugía. . La férula externa se retira definitivamente en alrededor de quince días, dejando con frecuencia una protección de micropore por una a dos semanas más. El paciente puede regresar a sus actividades cotidianas entre tres y siete días después de la cirugía.

El resultado final de la rinoplastia se observa hasta después de seis u ocho meses, sin embargo, el 80% del mismo se puede apreciar desde las cinco semanas.